“En la posguerra comíamos gatos y estamos a punto de empezar a volver a hacerlo” digo, como título

“En la posguerra comíamos gatos y estamos a punto de empezar a volver a hacerlo” digo, como título

Mí/ bio

Yo...
Sé pocas cosas, o prácticamente ninguna, aproximadamente conozco la hora en que nací- cuarto de hora antes que mi hermana- en Madrid, allá por el 1989. No es relevante, pero si alguien pregunta de dónde he salido alguna vez, de ahí, allí, sin cesárea ni necesidad de incubadora, melliza por tradición familiar y con prometedor fémur siendo un feto. 1, 51 cm (llegué al 1.54 pero he encogido), hoy, es lo que quedó: un fémur sin pretensión de cumplir su promesa.

Culpable de provocar dolores de cabeza crónicos y alguna que otra sonrisa, tengo en mi orgullo vital haberle ganado a un amigo un concurso de croquetas.


Esto...
(Algunas normativas me aterran, los lugares grandes también, puede que este blog hable de ello. Me abruman las texturas y los pigmentos, las palabras, el movimiento que puede contener un cuerpo, los trazos que controlan la voluntad, la voluntad que controla algunos trazos, la cosa de pesar tiempos, la piel muy blanca, los dameros, puede que este blog también hable de ello. 
Los materiales, la forma de la luz, los retos chiquititos, de conversación, la cerveza fría, no me gusta enero aunque sí los árboles, los árboles de invierno, puede que este blog hable de ello.  
La manera en que se consumen los cuerpos frente al espacio, o la determinación del espacio según los cuerpos, lo cóncavo y lo convexo, más que lo geométrico. Pensar la casa y el color de las cosas- las que no tienen inicialmente color, y cambiarles el color a las que sí, a las que lo llevan asociado-. Y puede que este blog no hable de ello, o sí.)

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